Una de las principales estrategias de marketing que han funcionado los últimos años ha sido el realizar acciones de marca o producto con youtubers, generando contenido en vídeo. Los youtubers se han ido convirtiendo en estrellas no solo en la generación de contenidos, sino también por su promoción de marcas y las empresas.
A las empresas, cada vez más, les interesa más trabajar con los youtubers, de cara a posicionarse ante sus audiencias, como reflejan las listas de los youtubers con más ingresos.
Las razones por las que las marcas se fijan en los youtubers es por la percepción que tienen de ellos sus seguidores, ya que los ven como gente auténtica y transparentes, por el simple hecho de poder ver video de lo que estos promocionan. Además, se sienten identificados con ellos porque los ven como ellos, gente cercana, a comparación de la opinión que pueda dar una revista o medio sobre ese mismo producto o marca.
¿Qué es lo que hace que los youtubers funcionen?
La respuesta puede ser «las emociones».
Cuando un youtube hace un video, esa misma emoción es la que nosotros sentimos, nos sentimos reflejados en ellos, ya que compartimos sus vivencias y experiencias. Los youtubers se convierten, por así decirlo, en un espejo en el que se reflejan las emociones y experiencias.
Este fenómeno es lo que se conoce en psicología como contagio de las emociones. Si nosotros vemos a una persona feliz, hace que nos sintamos más felices. Es esto lo que quizá podría explicar de forma sencilla, por qué funcionan contenidos en video.
Según un estudio realizado en cuentas de YouTube que tuviesen más de 10.000 suscriptores se identificaron las emociones que se mostraban en los vídeos y las que mostraban los espectadores en los comentarios asociados.
Las conclusiones lo dejaban claro: las emociones que se veían se acababan contagiando a la audiencia.